Los que me conocen personalmente saben de mi afición a los libros. Creo que el leer es una actividad que cubre una gran gama de necesidades, desde la lúdica hasta la introspectiva pasando por el acceso a conocimientos diversos.
Un libro es más que una historia, una teoría o la creación de una serie de personajes con los que identificarnos; puede llegar a ser la fuente de la que mane nuestra felicidad y motivación en la vida.
A continuación me gustaría hablar de una serie de beneficios psicológicos que tiene el hábito de la lectura:
1. Autoanálisis
Tanto hablemos de un libro de fantasía como de un ensayo político, en cualquier caso estamos accediendo a una fuente importante de autoconocimiento. No solo los libros de filosofía y/o psicología cumplen esta función.
Ya sea por la razón que nos hace identificarnos con un personaje como los motivos que nos ayuden a ver por qué razones votamos a un partido u otro, estamos tomando conciencia sobre nosotros mismos y por tanto, conociéndonos más.
2. Nuevas Perspectivas
La lectura nos ayuda a abrir la mente y tomar nuevas perspectivas ante los mismos sucesos o problemas. Si no podemos resolver un problema desde la misma visión que lo creó, la lectura es una herramienta muy efectiva para tomar otras alternativas.
3. Desarrollo cognitivo
Está demostrado que la lectura favorece el desarrollo cognitivo en los niños y retrasa su degeneración en personas adultas y mayores.
Ayuda a desarrollar capacidades y habilidades que en un futuro permitan crear y favorecer un desarrollo tanto personal como social.
4. Mejora de la comunicación
La lectura ayuda a comunicarnos de mejor manera. Aprendemos distintos estilos de comunicación, formas diferentes de decir las cosas. Además, tomamos contacto con nuevas palabras y expresiones.
Sabemos que cuando hay un diálogo agresivo e insultante, el resultado suele ser negativo al menos para alguna de las partes; en cambio, cuando es asertivo, suele dar como resultado un beneficio mutuo para ambas partes.
5. Crea relaciones
La lectura fomenta que los lectores quieran compartir sus impresiones, ideas y sentimientos con otros lectores. Esta necesidad de comunicación favorece la sociabilización de los lectores.
El ejemplo son las revistas de libros, los foros de lectores o las amistades espontáneas que se generan alrededor de los libros en cualquier ámbito, como por ejemplo en el trabajo.
6. Desarrollo de la imaginación
Junto al desarrollo cognitivo, la imaginación es una de las grandes beneficiadas de la afición a la lectura. Desde pequeños, los cuentos son una de las fuentes principales del desarrollo de la imaginación.
Un lobo que se come a una niña y su abuela, un muñeco de madera que le crece la nariz y una calabaza que se convierte en carroza, son ejemplos de fomento de la imaginación.
7. Motivación a la expresión
La lectura puede ser el origen que nos haga escribir también a nosotros y convertirnos en autores de historias y transmisores de ideas. Puede que hayamos encontrado así el medio de expresión que mejor se ajuste a nosotros.
Por supuesto, os animo a coger un buen libro y sentir la magia de la lectura en nosotros.
Carlos Postigo